La médica española, Celia Sánchez Ramos, ha sido galardonada por inventar un filtro óptico de pigmentación amarilla, para lentes de contacto, capaz de prevenir ciertos tipos de ceguera.
Persigue la función de proteger los ojos de radiaciones masivas, naturales o artificiales.
Especialmente creado para personas que han sido intervenidas de cataratas o que padecen una degeneración macular.
Pero además, pueden ser usadas como medio preventivo.
Otra de sus características es que se podrían evitar los efectos nocivos de la luz visible, por lo que no se produciría o mermaría la muerte de las células del ojo.
Por su invento la doctora ha sido distinguida con el premio a la mejor inventora 2009, galardón a la mejor patente española y la medalla de oro a la mejor invención en el área sanitaria.